Dave Mustaine's Band Maestro = MEGADETH, en el Arena Santiago

El concierto empezó con la banda chilena Criminal. Personalmente no es muy de mi gusto, pero como dijo Socito, deben ser buenos porque todo el mundo gritaba...
Un concierto redondo el de Megadeth a pesar de la falta de xoxes en el recinto, ya que no vi ninguno...
Buen sonido, buena presentación. Las viudas de Marty Friedman se perdieron de un espectáculo notable. Si bien la banda más que Megadeth parecía el proyecto solista de Mustaine, en cierto modo siempre ha sido lo mismo, excepto que Friedman es tan renombrado como Mustaine. La banda que tiene ahora es sólida y su sonido potente.
Chris Broderick en guitarra y guitarrista de sesión de Jag Panzer tiene una técnica exquisita poh weon...
El baterista canadiense Shawn Drover (ex Eidolon) se peinaba con el doble bombo al punto que su uso de las baquetas se veía hasta pajero, pero el sonido que sacaba a los bombos era como si tuviera cuatro piernas.
El bajista James LoMenzo (ex- White Lion) bien en todo su cometido y con su dosis perfecta de parafernalismo, si bien nunca tanto como Janick Gers, pero igual está aprendiendo para llegar al nivel de ese maestro...
Y Dave Mustaine como siempre amado y adorado por su fanaticada que en lugar de gritar "¡Megadeth!", gritaban "Oeeoeee Mustaine, Mustaine" que era en realidad el grito que se merecía la banda.
El público recibió con cierta frialdad los temas nuevos del último disco, pero cantó a rabiar con los éxitos clásicos como "Symphony of Destruction", "Peace Sells", "Hangar 18", "A Toute Le Monde", "Wake Up Dead" y "Holy Wars", este último una sorpresa ya que no venían tocándola en sus últimas presentaciones.
Mucha juventud, muchas mujeres preciosas poh weón, y el Arena Santiago demostró que cuando quiere sonar bien, lo hace.
Eso no más.